Objetivo Mundial de Oración
Habla, Señor, te escucho
Este es un extracto de un episodio reciente de Jane Hansen Hoyt Today. El episodio completo
Hace poco estaba en conversación con alguien acerca de la presencia del Señor. Cuánto la atesoro. La atesoro sobre todas las otras cosas porque sin Su presencia realmente no tenemos nada. Solo es cuando percibimos Su presencia que ocurre la verdadera vida, la verdadera relación.
Al estar expectantes y desear la presencia del Señor, somo como el pequeño Samuel. Constantemente decimos, “Habla, Señor, te escucho.”
Viva a la expectativa. Como creyentes, Cristo vive dentro de usted, así es que ya hay un deseo en su espíritu que constantemente es atraído hacia el Cielo. Dios lo puso allí. Siempre esté a la expectativa, escuchando con un oído atento, “¿Qué tienes que decirnos, Señor?”
Él quiere encontrarse con usted. Él quiere que sienta el consuelo, la fuerza, el poder, la autoridad de Su presencia. Esté a la expectativa de que Él venga a usted de esa manera. Aprenda a esperar por Su presencia y aprenda a cultivar Su presencia. Le cambiará la vida.
¡Sea osado! ¡Sea valiente! ¡Esté a la expectativa!
Este es un extracto de una carta reciente de Jane, Aglow – Nuestra ventaja divina.
Quiero animarlos hoy a que sean osados cuando Él les pida que hablen la verdad. Sean valientes para tomar una postura, aunque sean la única persona, porque Él está con ustedes. Estén expectantes porque Él hará todo lo que ha prometido. ¡Vienen nuevos líderes! ¡Están naciendo nuevos grupos! Las señales, los milagros y prodigios nos asombrarán! ¡Manténganse firmes y vean Su bondad en la tierra de los vivientes!
Señor, ¡sabemos quién eres! Sabemos cuánto nos amas, que nos cubres, que Tu bondad va delante y detrás de nosotros. Gracias por abrir nuestros ojos para ver plenamente cómo nos ve el cielo, cómo nos preparó el cielo para ser la ayuda que Tú has enviado a nuestra generación. Nos sentimos humildes y fortalecidos. Nos sentimos honrados y maravillados por Ti. Amamos las maneras en que Tú nos has guiado en el pasado y anticipamos con gran expectativa ver cómo nos guiarás en el futuro. ¡Qué poderoso es el Dios al que servimos! Te amamos.