Oración por el Presidente
Protección: Padre, oro que la preciosa sangre de Jesús está sobre nuestro Presidente, su familia y su personal. Que tus ángeles cuiden de él y lo protejan en todos sus caminos hoy. (Sal. 91:11)
Que el Ángel del Señor acampe alrededor del Presidente y lo libre de todo mal. Líbralo de todos sus temores y sálvalo de todas sus angustias. (Sal. 34:7, 4 y 6)
Declaro que ninguna arma forjada en contra del Presidente prosperará, y condeno toda lengua que se levante contra él en juicio. (Is. 54:17)
Oro que Tú lo escondas del plan secreto de “los malignos, de la conspiración de los malvados que afilan como espada su lengua”. (Sal. 64:2-3) Señor, cierra las bocas de quienes lanzan como saeta sus palabras amargas y que tropiecen con sus propios dichos. (v. 3) Bendito sea el Señor que nos permitió escapar cual ave del lazo del cazador. (Sal. 124:6-7)
Guárdalo de los lazos que el enemigo le ha tendido. Protégelo de los que buscan destruirlo. Dale Tu forma de escapar. (Sal. 141:9-10)
Bendice al Presidente, Señor, y rodéalo con Tu escudo de favor y de misericordia. (Sal. 5:12, 32:10)
Sabiduría: Padre, que el Presidente reciba abundante sabiduría de lo alto para tomar las decisiones que necesita tomar hoy. (Stg. 1:5)
Despierta su oído para escuchar como los sabios (Is. 50:4), y mueve su corazón para estar dispuesto y ser sabio al hacer la obra que Tú le has dado para hacer. (Éx. 35:5, 36:2)
Que sea “lleno del conocimiento de la voluntad de Dios en toda sabiduría e inteligencia espiritual” (Col. 1:9) y que los ojos de su entendimiento sean alumbrados con Tu verdad. (Ef. 1:18)
Tu Palabra dice que “el que gobierne entre los hombres debe ser justo para gobernar en el temor de Dios” (2 S. 23:3). Oro que el Presidente gobierne en el temor de Dios en lugar de en el del hombre. Líbralo de la influencia de la falsedad, el engaño y la influencia del consejo impío. Llena su mente, voluntad y emociones con la verdad y la voluntad y propósitos de Dios. Líbralo de las pasiones de la carne y el pensamiento mundano y confórmalo a la mente de Cristo. (1 Co. 2:16)
Gracias por darle discernimiento para conocer Tu voz para que no siga la voz del extraño. (Jn. 10:4-5)
Oro que Tú lo llenes de poder con toda sabiduría y conocimiento para que pueda sobresalir en todo lo que emprenda (Ef. 3:20) para guardar la justicia, la verdad y el juicio en toda la tierra. (Is. 28:17)