Cheryl Rice, vicepresidenta de Desarrollo Ministerial del Faro de Goodyear, Arizona, compartió las diferentes actividades que el grupo ha estado realizando en sus reuniones mensuales.
Para comenzar el año, el grupo planeó la boda de sus líderes de alabanza, Melvin y Krisa, quienes han dirigido la alabanza desde que el nuevo Faro abrió sus puertas en mayo de 2023. Todos aportaron ideas creativas para hacer de la boda una hermosa celebración de su amor mutuo y por el Señor.
En febrero, salimos a la comunidad y realizamos nuestro primer alcance comunitario para personas sin hogar en una iglesia local. Pudimos bendecirlos con la donación de mantas, chaquetas, ropa, zapatos y artículos de aseo personal. Después de elegir lo que necesitaban, pudieron disfrutar de un almuerzo caliente y escuchar a nuestro equipo de alabanza alabando al Señor. Fue un gran honor ser las manos y los pies de Jesús. Nuestros corazones fueron bendecidos cuando una persona aceptó a Jesús como su Señor y Salvador, y muchos otros recibieron oración.
Este grupo de líderes de Lighthouse disfruta de las asignaciones que el Señor tiene para su comunidad. Saben que son parte de la ayuda que Dios ha enviado a Goodyear y están ansiosos por ver cómo se comparte el Evangelio de manera práctica cada mes.
Si su grupo de Lighthouse no tiene un Vicepresidente de Desarrollo Ministerial, quizás Dios haya inculcado en su identidad la capacidad de aceptar ese puesto. Aquí está la descripción del puesto:
Vicepresidente de Desarrollo Ministerial
Dorcas era conocida por ser una mujer llena de buenas obras. Benevolente, compasiva y devota, se entregaba generosamente a los demás. Era conocida por extender sus manos a los necesitados, tanto física como económicamente. Con su aguja de coser en mano, estableció un servicio que llegó a todos los confines de la tierra. Las Escrituras nos dicen que Dorcas fue la única mujer mencionada en la Biblia como discípula, y que la compasión y la bondad brotaron de ella, al igual que Jesús. Vivía apartada de los focos y actuaba entre bastidores para ayudar a los más necesitados.
Dorcas vivía a poca distancia de Jerusalén, en el puerto de Jope, un importante centro cristiano durante los años en que la nueva fe se extendía desde Jerusalén al Mediterráneo. El hermoso puerto estaba a medio camino entre el Monte Carmelo y Gaza.
Quizás la casa de Dorcas tenía una gran casa de huéspedes con tejado a la que se accedía por una escalera. Desde este punto estratégico, podía ver a los necesitados caminar por las calles de Jope, bajando al mar en busca de trapos que la corriente arrastraba para vestirse. Mientras observaba, un deseo de ayudar comenzó a despertar en ella.
Dorcas sentía una gran compasión por las viudas y los huérfanos, quienes a menudo vestían harapos que les quedaban mal. Cada persona que trabajó con Dorcas se esforzó con gran esmero para asegurar que todos a quienes ayudaron se fueran con un espíritu renovado y una gran valía, simplemente porque alguien vio, se preocupó y se atrevió a marcar la diferencia.
Como Vicepresidente de Desarrollo Ministerial, reconoces las oportunidades para intervenir y marcar la diferencia en tu comunidad. Desde la gran ventaja de ver como Dios ve, verás los dones y talentos en los demás y los conectarás con oportunidades de ministerio dentro de la comunidad. Y no te detengas ahí, ayudas a llevar el ministerio de Aglow más allá del lugar de reunión, a medida que el grupo se hace conocido en la comunidad gracias a la compasión y el cuidado que muestra hacia las necesidades de los demás.
Al igual que Dorcas, tu rol abre la puerta para que grupos de personas que pasan desapercibidos encuentren a alguien que realmente se preocupa por ellos, escucha sus clamores y llega con ayuda. Quienes forman parte del Faro son sus manos y pies para la comunidad perdida y dolida de tu ciudad. Eres la ayuda que Dios ha enviado y, al igual que Dorcas, eres como el pegamento que mantiene unido al grupo gracias al increíble don del servicio práctico que puede transformar a toda una comunidad.
Ahora, aquí tienes una oración que puedes hacer sobre ti mismo al asumir esta posición. Adelante, di la oración y prepárate para orar.
Abre las manos y haz esta oración sobre ti:
Padre, qué alegría dar un paso de fe, confiando en que me has llamado, me has ungido y me has dado todo lo que necesito para ver a mi comunidad como tú la ves. Dependo de ti al sentir que el Espíritu Santo me impulsa a abrir los ojos y ver las vastas necesidades. Me has posicionado perfectamente, formándome en el vientre de mi madre. Mi identidad celestial me precede y prepara el camino. Asumo esta posición voluntariamente para un momento como este, consciente de que tú eres el Proveedor. Tú vas delante de nosotros y has preparado el camino para todo lo que necesitamos. Agradezco que confíes en mí. En el nombre de Jesús, recibo toda la unción y el manto seguro que acompaña a esta posición.
Estamos ansiosos por ver lo que harás en tu comunidad.